domingo, 29 de septiembre de 2013

Cuáles son los miedos a marcharse cuando tengo una pareja abusiva?

El temor puede mantenerte en una relación que de otro modo podrías dejar y dejarías. Es importante que seas capaz de evaluar tu situación sin miedo, ya que es la única manera en que lograrás ver con claridad y lógica como quieres que sean tu relación y tu vida y sobretodo es la manera que te sentirás capaz de tomar decisiones de forma racional  en lugar de emocional.
En ocasiones existen razones válidas para continuar. Sólo tú puedes decidirlo, pero tanto si decides quedarte o abandonar, aún tienes que superar tus miedos porque mientras sigas sintiendo temores sobre abandonar, ellos y no la razón dictarán tu decisión.
Temor a estar sola:   Muchas mujeres temen quedarse solas y asumen que quizás no volverán a conseguir una pareja y por ello muchas veces se quedan con la pareja abusadora. De lo que no se dan cuenta y que realmente es importante es que ya llevan mucho tiempo solas. Probablemente, la peor clase de soledad es estar con alguien que no está ahí: no está ahí para amarte, apreciarte, valorarte, comprenderte y escucharte.
Puedes querer un hombre en tu vida sin necesitar uno; si todavía estás con un hombre abusivo debido a tu gran temor de estar sola, puedes en lugar de creer que necesitas una pareja recordarte a ti misma repetidamente estas cosas:
1.       Tu valía como persona depende de ti, no del amor de otras personas, y ciertamente no de tus crueles compañías. Tú vales simplemente por ser tú, tanto si tienes pareja como si no. Cuando te aceptas a ti misma de manera incondicional, no necesitas la aprobación de los demás para sentirte valorada.
2.       Adiós al cuento de hadas y bienvenida la realidad. Continuar con tu pareja abusiva es aferrarse a un cuento de hadas, es estar viviendo una ilusión. Decidir es ser libre, elegir, buscar tu camino, lo que tú quieres y significa entender que ya no estás en un castillo y comienzas a construir tu casa.
3.       Tu pareja no es el único para ti. Puede que creas que si abandonas, estarás perdiendo al único y verdadero amor de tu vida, que jamás volverás a sentir amor y que será muy difícil sentir pasión. Asumes que tu pareja tiene una varita mágica que produce el efecto de encantamiento permanente volviéndose casi una adicción y la confundes esto con amor.  Si piensas que tu pareja es la única persona en el mundo que puedes amar o con la que puedes disfrutar sexualmente, estás enganchada en un supuesto, no en un hecho, tu como sabes que no volverás a querer a alguien? Posees poderes  sobrenaturales que te permitan predecir  el futuro? 
4.       Puedes arreglártelas sola: Ciertamente existen ventajas en tener un hombre cerca, pero también puedes aprender a estar contigo misma.  Puedes hacer las cosas que quieras: salir con amistades, trabajar, estudiar, ser responsable de tus finanzas, criar a los niños y esto no requiere tener a una pareja al lado. Nadie se muere por no tener pareja, aprendemos a tolerar la soledad y buscar las ventajas que esta trae para ti: libertad, decisión en como usas tu tiempo y divertirte sin ansiedad y miedo.
5.       Estar sola no significa que  tengas que permanecer sin amor, sin compañía o sin sexo. Estar sola no es fácil ni está exento de dolor al principio, pero tu vida tampoco es fácil e indolora cuando estás con tu pareja abusiva. Lo importante es que cuando estás sola, se pone fin al dolor producido por el abuso. En la medida que  pase el tiempo aprenderás a disfrutar de la tranquilidad y paz, encontrarás nuevos rumbos y personas y poco a poco irás ampliando tu red social, saliendo del abismo del abuso.

Los temores al cambio y a lo desconocido.  Cuanto más inseguras son las personas, más necesitan de los modelos familiares y saber qué esperar. Esto es especialmente cierto en aquellas personas que están inmersas en una relación abusiva. El temor a que llevar a cabo el cambio nos puede conducir a algo peor  a menudo mantiene a las personas encerradas en donde están. Creen “más vale algo conocido, que lo bueno por conocer”. Cambiar las costumbres y arriesgarse a probar otras nuevas, son conceptos que  ves como “peligrosos”, pero sabes cómo lograrlo? Haciendo el cambio, dando ese paso e identificando que tu única barrera  es tu imaginación: ves escenarios catastróficos. Si permites que estos temores tomen dimensiones gigantescas en tu mente, tendrás demasiado miedo y permanecerás en el abuso. Puesto que el miedo al cambio es en verdad un temor a cómo puedes manejar las nuevas situaciones o condiciones, la mejor manera para reducir tu temor es forzarte a cambiar algunas cosas de tu vida. Tu coraje para hacer cosas que temes es como un músculo del cuerpo; para volverse más fuerte tiene que  ser ejercitado. Hay que arriesgarse a una incomodidad temporal para encontrar la comodidad.
Puede que te sientas de verdad muy cómoda con el cambio o puede que te acostumbres a él y te guste. Pero de cualquier manera, puedes superar el horror a EL, por tanto no te volverás a sentir pegada a las malas situaciones. Cada vez que logres afrontar el cambio, te fortalecerás y continuarás y te sentirás satisfecha por lo que has logrado y así, lo irás generalizando a otros aspectos de tu vida.

Bibliografía:

El secreto del abuso verbal. Albert Ellis y Marcia Grad. 2002
Adaptaciones: MC Vera M.

Instituto Albert Ellis Colombia

miércoles, 25 de septiembre de 2013

El abuso sutil

EL ABUSO SUTIL

El abuso sutil te produce la incómoda sensación de inquietud de que hay algo que está muy mal, pero no puedes llegar a averiguar que es. Puede que sientas una sensación de malestar en el estómago, un nudo en la garganta, o alguna reacción física. Cuando convives con el abuso sutil, te tornas tan condicionada por él que no parece tan malo como una vez lo fue. La ansiedad callada se vuelve tu nueva norma. Pero el efecto acumulativo a través del tiempo de las múltiples repeticiones de abuso sutil puede ser devastador. Aunque las variaciones de abuso sutil son muchas, todas tienen que ver con el ser tratada con desconsideración. Algunas de las formas más comunes son:

·         Expresiones desaprobadoras y acusatorias, tales como un rostro exasperado o enfadado, lo cual niega tu pareja, con lo que implica que te imaginas cosas.
·         Tono de voz desaprobadores, acusadores o sarcásticos, lo cual niega tu pareja, normalmente afirmando que has oído mal.
·         Comentarios hirientes emitidos con una voz sincera y preocupada.
·         Críticas sobre tu apariencia, las cosas que dices, o la manera en que las dices, que tu pareja argumenta que son por tu propio bien.
·         Comentarios sobre que estás equivocada, eres estúpida, descuidada o por otra parte corta o incapaz, que tu pareja niega haber querido insinuar o decir en absoluto.
·         Juicios o incluso rechazo sobre la validez de tus ideas, pensamientos o sentimientos. Tu pareja insiste en que conoce tus intenciones, pensamientos o sentimientos mejor que tu.
·         Te desafía o emite observaciones condescendientes sobre opiniones, creencias, elecciones, decisiones, metas, sueños o logros. Tu pareja siempre te exige pruebas antes de creer lo que dices.
·         Insultos, comentarios despectivos, u observaciones sarcásticas, que pueden incluir réplicas ácidas o desaires hacia ti, tu familia o amigos, tu trabajo o las cosas que te gusta hacer. Tu pareja te explica que no quiere insinuar nada sobre ti, no quiere decir lo que piensas que quiere decir, sólo está bromeando, te lo estás imaginando o puede que niegue haber llegado a hacer en absoluto el comentario.
·         Bromas que te rebajan y que pareja afirma que te las has tomado mal. Te acusa de ser demasiado sensible y de exaltarte en exceso.
·         Comentarios repetidos de que algún otro, siempre o nunca hace esto o aquello, queriendo insinuar que la otra persona es mejor que tu.  Cuando consigues algo especial, tu pareja no lo ve como algo importante.
·         Conducta insensible o hiriente que arruina tu humor cuando te sientes feliz o excitada o cuando estás celebrando algo especial.
·         Interrupciones de tu pareja cuando conversas. Te interrumpe cuando estás hablando con otras personas o contesta preguntas dirigidas a ti.
·         Repetidas acusaciones de que prestas más atención a tus hijos, a otros miembros de la familia o amigos que a él.
·         Altera tus palabras, distorsionando el significado de lo que dices.
·         Dice lo que tiene que decir, y luego se niega a escucharte a ti.
·         Te ignora o no te responde cuando le haces una pregunta.
·         Te paga con silencios y rechaza que algo esté ocurriendo.
·         Te oculta sus pensamientos y sentimientos.
·         Con frecuencia no aparece en acontecimientos que son importantes para ti, llega tarde, o no viste de la manera adecuada.
·         Espera o desea que estés en casa esperándole incluso cuando no sabe o no dice cuándo llegará.
·         Rompe sus promesas y compromisos contigo: acepta hacer cosas pero no las hace, después afirma que se le “olvidó” o te exige que dejes de regañarlo por ello.
·         De manera habitual se niega a llevar a cabo pequeñas peticiones que otras personas considerarían razonables.
·         Por rutina coloca sus deseos y necesidades por delante de los tuyos.
·         Generalmente no acepta que  ha cometido un error o que se ha expresado de manera inadecuada.
·         Tiende a manipularte de tal manera que te sientas “culpable”.
·         Suele hacerte sentir como si tus cosas no fueran importantes.
·         Te dice que gracias a él tienen esto o aquello.
·         Considera que la cosas deben hacerse en el orden que él considero, acorde a sus prioridades o necesidades.




Bibliografía:

El secreto para superar el abuso verbal. Albert Ellis y Marcia Grad. 2002.

ABUSO VERBAL

Abuso verbal: hechos duros y fríos: Reflexión para las relaciones de parja


1. El abuso verbal es una forma de violencia doméstica. Es una forma de tortura psicológica y emocional. No es nunca una forma de amor.

2. La poderosa conexión entre la pareja en una relación abusiva normalmente se percibe como amor, cuando de lo que realmente se trata es de una desesperada dependencia emocional mutua.

3. Intentar llegar de manera emocional hasta una pareja que se está comportando de forma irracional es algo que está condenado al fracaso.

4. Los abusadores verbales que no reciben ayuda profesional no mejoran; casi siempre empeoran.

5. El abuso verbal en ocasiones se extiende hasta incluir los ataques físicos a objetos: golpeando, tirando, desgarrando y rompiendo las cosas. Los ataques físicos a objetos pueden extenderse a ataques físicos sobre la pareja.

6. El abuso verbal es la primera etapa del abuso físico. el abuso verbal siempre precede y acompaña al abuso físico, pero muchas parejas que abusan de manera verbal nunca se vuelven violentos.

7. Las amenazas verbales de hacer daño y el blandir armas deben tomarse muy en serio.

8. Cuando el abuso verbal que ha estado sucediendo en privado empieza a tener lugar delante de otras personas, a menudo es una señal de que el abuso está avanzando hacia la segunda etapa: el abuso físico.

9. cuando sea evidente que existe una amenaza física, debes tomar medidas preventivas. Consigue ayuda y márchate. O, al menos, prepárate a conciencia para el caso de que alguna vez tengas que marcharte apresuradamente.

10. Es mucho más fácil salir de una relación verbalmente abusiva antes de que hayas estado en ella durante años y que, a largo plazo, te haya cobrado un peaje emocional, psicológico y físico enormemente debilitador.


El secreto para superar el abuso verbal. Albert Ellis y Marcia Grad. 2002.

lunes, 9 de septiembre de 2013

Habilidades Sociales, que son ? Una mirada general

Que son?
Las habilidades sociales hacen referencia a la capacidad de expresar nuestros pensamientos y sentimientos de forma clara y precisa partiendo del respeto hacia el otro.  Es el conjunto de comportamientos que se manifiestan en situaciones de relación con otras personas, en las que se expresan sentimientos, pensamientos, ideas u opiniones.
Tanto a nivel social como laboral generalmente se producen situaciones en  las que hay que hacer cumplidos, expresar agrado y afecto, rechazar peticiones, expresar opiniones, hacer llamados de atención, pedir un cambio de conducta o disculparse. Por ello, por medio de estrategias claras se adquiere la habilidad para desempeñarse adecuadamente en cualquier tipo de situación de manera asertiva

Personas Asertivas:
Expresan directamente lo que sienten, sus necesidades, sus derechos y sus opiniones pero respetando los derechos de los demás. En las conversaciones con los demás, lo que expresan con palabras va acompañado de conductas no verbales: postura adecuada, gestos con la cara y con las manos. Todo ello para reforzar o aclarar el contenido de la conversación.

         Para actuar Asertivamente:
Piensa que quieres decir
Piensa las consecuencias de tu conducta.
 Actúa respetando los derechos de los demás.

Personas No Asertivas o Pasivas:

         Tienen incapacidad o mucha dificultad para expresar sus sentimientos, pensamientos, opiniones, son incapaces de decir NO. Dejan que los demás violen sus derechos. Se comportan de la siguiente manera: Evitan el contacto visual, volumen de voz bajo, postura corporal tensa, nervios y ansiedad. A nivel laboral, la persona posee la sensación de ser incomprendida, se siente sola e incluso puede llegar a somatizar como manera de llamar la atención.

Personas Agresivas:
Suelen emplear gestos amenazantes, un lenguaje con doble sentido que ofende al interlocutor y muestra una actitud de desprecio o descalificación por lo que dicen u opinan los demás. Siempre desean “salirse con la suya”, a costa de lo que sea. Con este comportamiento lo único que logran es que los demás los eviten, perdiendo de esta manera amigos.
Características:

Mirada fija
Voz muy alta
Habla muy rápido
Gestos de amenaza
Postura intimidatoria
Actitud de enfrentamiento

Aspectos que Perturban la Comunicación:

Elección de un momento poco adecuado para la conversación
Hacer preguntas impertinentes, de reproche.
Poner “deberes” a los demás haciendo uso excesivo de la expresión: “ tu deberías”
Cuando lo que se dice no corresponde con los gestos.
Interrumpir a la persona que habla.
Pasarse de chistoso.
Emplear la ironía
Dar consejos repetidamente  sin que se los pidan.
Ponerle doble sentido a todo lo que se dice.
Discutir por discutir, sin aportar soluciones.
Ignorar a nuestro interlocutor.
Juzgar los mensajes de quien habla con nosotros.
Dar respuestas cortantes.
Emplear un volumen de voz muy alto o muy bajo.
Adivinar lo que nuestra interlocutor nos quiere decir.



jueves, 5 de septiembre de 2013

Reflexión sobre imagen corporal






Foto: The Mom (grupo en Facebook)

Reflexión:  La búsqueda del cuerpo perfecto solo muestra la imperfección del mismo. María del Carmen Vera M.

Pon en la balanza  un cuerpo  "perfecto" versus tus sueños, fortaleza, opciones, belleza, talento, sueños, y estos cuanto pesan?